Crisis en las prisiones catalanas: el CSIF alerta de un 2024 marcado por la violencia

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) alerta que 2024 será recordado como uno de los años más críticos en la historia reciente de las prisiones catalanas en cuanto a incidentes violentos. El asesinato de una funcionaria, en marzo, es el punto más trágico y anula cualquier posibilidad de un análisis optimista de la situación actual por parte de la Dirección General de Asuntos Penitenciarios.

CSIF ha instado a la Subdirección General de Centros a restablecer el sistema de transparencia implementado en 2017, que proporcionaba datos de agresiones en los centros penitenciarios de Cataluña. Las reuniones de transmisión de información fueron suspendidas en enero de este año sin previo aviso, lo que obligó al sindicato a solicitar los datos a través del portal de transparencia.

Aumento de la violencia

Los datos facilitados por la administración no reflejan adecuadamente el número de trabajadores agredidos, ya que se ha utilizado un nuevo método de recuento para minimizar la percepción de peligrosidad e inseguridad. Según CSIF, esta estrategia busca proteger la imagen del sistema penitenciario promovida por Gemma Ubasart y Amand Calderó.

Un análisis de CSIF de los incidentes registrados hasta el 31 de julio de este año, comparado con el mismo período del año anterior, revela un incremento en las agresiones. Destaca que más del 20% de los incidentes graves registrados (10 casos) tienen un componente de violencia sexual, una forma de violencia que los trabajadores penitenciarios enfrentan debido a la sensación de impunidad que experimentan algunos internos.

Actualmente, la administración no facilita el Número de Identificación del Interno (NIS) de los agresores, lo que impide identificar a reincidentes y agrava el problema.

Falta de medidas 

Además, denuncian que no se han adoptado medidas efectivas para frenar la creciente violencia en las prisiones catalanas. La firma del nuevo acuerdo ha sido una oportunidad perdida para obligar a la administración a implementar medidas claras para mejorar la seguridad de los trabajadores. Solo se ha elaborado una recopilación de declaraciones de intenciones sin ninguna garantía sobre su implementación efectiva.

El sindicato recuerda que la administración tiene la costumbre de no cumplir con los acuerdos firmados. Un ejemplo de ello es la falta de implementación de los aerosoles de contención, prometidos para el 1 de julio de 2023, que podrían haber evitado muchos incidentes.

Situación crítica en las prisiones

El informe obtenido a través del portal de transparencia muestra un retrato más realista de la situación diaria en los centros penitenciarios. Hasta el 31 de julio de este año, se han registrado:

• 79 incendios
• 33 sobredosis leves
• 85 tentativas de suicidio

En total, 197 incidentes donde la intervención de los trabajadores ha sido crucial para evitar consecuencias más graves. Desde el 1 de enero, se han registrado 15 muertes, de las cuales 8 fueron por causas naturales y 7 por suicidio.

La seguridad como prioridad

Los trabajadores penitenciarios reiteran su deseo de volver a casa sanos y salvos, subrayando que la seguridad es su máxima prioridad. CSIF insiste en que “es prioritario establecer medidas que garanticen la seguridad de los trabajadores. Este mensaje no ha sido comprendido por UGT y otros sindicatos que firmaron un acuerdo sin el apoyo de las plantillas. Hasta 2.145 profesionales han manifestado su desacuerdo firmando en contra de dicho acuerdo”.