La elección tendrá lugar el 9 de marzo

El líder de UGT en Cataluña recibe peticiones para “españolizarse” si quiere suceder a Cándido Méndez

Josep María Álvarez figura como uno de los candidatos con más opciones a ocupar la secretaría general

La carrera por la sucesión de Cándido Méndez al frente de UGT se calienta. El líder del sindicato en Cataluña, Josep Maria Álvarez, se coloca en cabeza de cara al congreso confederal que tendrá lugar en Madrid entre el 9 y el 12 marzo. Pero ha comenzado a recibir críticas de algunas federaciones.

Álvarez, veterano líder de Cataluña, cumplirá 60 años en marzo y lleva 25 en la formación catalana, que se ha significado políticamente al apoyar el derecho a decidir. Para optar a la elección cada uno de los tres candidatos deberá obtener 150 avales (el 25% de los 600 delegados). Durante estos días se ha desatado la pelea por lograr esos respaldos, que no pueden ser compartidos.

Según ha sabido El Confidencial Digital por fuentes internas de UGT, algunos dirigentes históricos del sindicato han aconsejado a Álvarez que se “españolice” si quiere pelear por liderar la organización a nivel nacional y suceder a Méndez, después de 22 años al frente de la secretaría general.

Estos mensajes proceden, fundamentalmente, de afiliados y delegados en Madrid, Andalucía y Extremadura, quienes le han exigido que abandone sus guiños a la independencia si busca el respaldo de sus federaciones.

Los caladeros más nutridos de UGT están en las federaciones del metal (MCA) y la de Servicios Públicos (FSP), la más numerosa del sindicato, y la de enseñanza. En ese sentido, mientras el Metal parece inclinarse por Álvarez, Miguel Ángel Cilleros parece tener el respaldo de la Federación de Servicios.

En sus apariciones públicas recientes, Álvarez ha asegurado que cuenta con apoyos y “simpatía” en el resto de España, lo que le hace ser optimista sobre su candidatura.

Pero no ha pasado desapercibido precisamente para muchos miembros de UGT fuera de Cataluña que el sindicalista ha comenzado ya a pronunciar algunos de sus últimos discursos íntegramente en castellano.

Algunos dirigentes comparan su transformación con la experimentó Joan Rosell para convertirse en el líder de los empresarios españoles, desde la dirección de la patronal catalana Foment del Treball.

Una operación similar a la de Juan Rosell (CEOE)

Hay que recordar que el actual presidente de la CEOE concurrió en 2010 a sus primeras elecciones para liderar a la gran patronal española con su nombre en catalán, Joan Rosell, y así figuró hasta tiempo después, por ejemplo, en Wikipedia. Ahora ya no. También en las redes sociales su nombre aparece ya castellanizado.

Cuando presentó la candidatura a la gran patronal, una de las pegas previas que le pusieron era precisamente su excesivo catalanismo, y se le sugirió que sus planteamientos y gestión fuera más ‘española’.

 

Esa operación se puso en marcha, porque el líder de los empresarios compareció ya en diversos eventos en los meses siguientes, y en las invitaciones figuraba ya con el nombre “Juan Rosell”.

Apoyo de las federaciones del metal y servicios

Josep María Álvarez parte con el apoyo de las federaciones del metal y de servicios, dos de las que tienen más afiliados y delegados, pero tendrá que competir con otros dos candidatos para lograr ese mínimo del 25% de los 600 participantes en el congreso confederal.

El primero en iniciar la carrera hacia la sucesión fue Miguel Ángel Cilleros, líder de la federación de Servicios de Movilidad y Consumo, hacia el que Méndez había mostrado más proximidad. Después, también anunció su candidatura el secretario general de la UGT en Canarias, Gustavo Santana.


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