En municipios de tradición nacionalista

La presión abertzale complica la formación de las listas del PP en Navarra

El presidente de la gestora del partido reconoce que las mayores dificultades se encuentran en pueblos del norte de la comunidad

El presidente de la gestora del PP de Navarra, Pablo Zalba (izquierda), con Carlos Floriano.

El Partido Popular de Navarra afronta sus segundos comicios forales y municipales desde la ruptura del pacto con UPN y su refundación en la comunidad. En 2011 fueron quinta fuerza política y cosecharon 46 concejales, incluidos dos ediles en Pamplona.

Estos años de andadura en solitario no han sido fáciles para el PP foral. Su primer presidente elegido en un congreso, Santiago Cervera, dimitió en 2012 tras ser detenido por su presunta participación en el chantaje al ex presidente de Caaja Navarra.

El sustituto de Cervera, Enrique Martín, también renunció al cargo el pasado mes de julio tras dos años al mando del partido, por “falta de apoyo de la dirección nacional”. Finalmente, el eurodiputado navarro Pablo Zalba se hizo cargo del partido como presidente de una comisión gestora que dirigirá el partido hasta que un congreso regional o una junta directiva elija a una nueva dirección.

El Confidencial Autonómico ha podido conversar con Pablo Zalba acerca de las elecciones forales y municipales de mayo de 2015 y cómo las afronta el PP navarro.

El programa para las elecciones forales

Zalba asegura que “aún es prematuro” hablar de quiénes integrarán la candidatura del Partido Popular al Parlamento de Navarra, y también de quién la encabezará, aunque sí apunta que “lo lógico” sería que él no fuera el número uno de la lista. Hay que recordar que la dirección nacional del PP todavía no ha hecho ningún anuncio sobre los cabezas de lista en las elecciones autonómicas, y parece que aún retrasará un tiempo esa decisión.

Ahora mismo estamos elaborando el programa; nos parecen más importantes las ideas que las personas”, explica el líder provisional del PP foral. En estas semanas los populares están manteniendo numerosas reuniones con distintos sectores económicos y sociales para recabar ideas y perfilar las líneas maestras de su programa, que estarán definidas antes de Navidad.

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Según explica a ECA el presidente de la comisión gestora del Partido Popular de Navarra, uno de los ejes de su programa electoral será “la modernización de la política”: por ejemplo, muchas de las propuestas que han hecho en esta legislatura y que han sido rechazadas en el Parlamento de Navarra, como la reducción del número de diputados forales y la eliminación del Defensor del Pueblo autonómico, irán de nuevo en su programa.

Los populares navarros centrarán otra buena parte de su programa en propuestas económicas. Lo que rechazan es entrar en discusiones sobre la defensa de la foralidad, a raíz de los numerosos recursos del Estado contra leyes aprobadas por el Parlamento de Navarra, con el voto en contra también de UPN (que está en minoría en la cámara foral): “Algunos partidos quieren crear un conflicto donde no lo hay”.

Más difícil en zona abertzale

Lo que sí está más avanzado es la elaboración de las listas municipales. Pablo Zalba explica a El Confidencial Autonómico que las agrupaciones locales y la dirección regional ya están trabajando para diseñar las candidaturas para los municipios navarros: “Nuestra idea es tener candidaturas en el mayor número posible de municipios”.

Los populares se enfrentan en Navarra a una dificultad añadida que no se da en otras regiones de España: el temor a ETA y al acoso de los radicales abertzales. “Estamos mejor que hace cuatro años [cuando la banda terrorista aún no había anunciado el cese definitivo de la actividad armada], pero aún es muy difícil hacer política en algunos pueblos de Navarra”, asegura Pablo Zalba.

El presidente de la gestora de los populares navarros señala que aún hoy les es más difícil conseguir personas dispuestas a presentarse por el PP en zonas tradicionalmente dominadas por la antigua Batasuna, como la comarca de La Barranca (con municipios como Alsasua y Echarri-Aranaz), que en otros municipios más ‘tranquilos’ de Navarra.

El objetivo principal del PP en Navarra, según afirma Zalba, es conseguir ser “un partido clave” para la gobernabilidad de los municipios y de la Comunidad Foral, donde la fragmentación es mucho mayor que en otras regiones.