Ximo Puig pide a los líderes regionales europeos movilizarse ante “la mayor emergencia desde la Segunda Guerra Mundial”
El presidente autonómico ha dirigido hoy 330 cartas para urgir a la Unión Europea por el COVID-19
El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha enviado hoy 330 cartas a los presidentes de regiones europeas y otra al presidente del Comité Europeo de las Regiones, el griego Apostolos Tzitzikostas, para que pidan a la Unión Europea una reacción ante “la mayor emergencia desde la Segunda Guerra Mundial” y apoyen “el impulso del plan Marshall europeo que ayude a reflotar las economías europeas más dañadas por las consecuencias del COVID-19”.
Puig ha argumentado en estas cartas que “más allá del papel de los Estados, las regiones no pueden permanecer impasibles ante la gravedad de la emergencia sanitaria, social y económica que está comportando la pandemia”.
“Seamos conscientes de la magnitud de la tragedia”
El presidente valenciano alude, también, al papel de las regiones europeas “en la posterior etapa de reconstrucción socioeconómica”.
Expone que las regiones “no pueden ser indiferentes”, ante la muerte, la enfermedad y el dolor de millones de europeos en estas semanas, que requieren “una reconstrucción de las regiones afectadas”.
Insta a las regiones a que se dirijan a las instituciones de la Unión Europea, especialmente el Consejo, el Parlamento, la Comisión, el Comité Económico y Social, el Banco Central y el Banco de Inversiones, con el fin de “movilizar todos los recursos necesarios para la cohesión social y la cohesión territorial”, ya que “ni una posición timorata y falta de decisión serían respuestas válidas en esta ocasión”.
Alude a que, en dos meses, han fallecido en la Unión Europea más de 20.000 personas, que son “más del doble de las 9.387 cruces blancas de madera erigidas en el Cementerio Estadounidense de Normandía, situado frente a la playa francesa de Omaha que acogió el desembarco más famoso de la Segunda Guerra Mundial”.
Acaba su carta destacando que “los pueblos europeos no nos perdonarían que hiciéramos algo distinto (…). Seamos conscientes de la magnitud de la tragedia”.
