Los antidisturbios aún no conocen el despliegue para la Copa Libertadores
Los mandos de las UIP de la Policía Nacional no les darán detalles hasta el jueves, a tres días del partido entre Boca Juniors y River Plate en el Bernabéu
Las Unidades de Intervención Policial (UIP) ha recibido esta semana el calendario de eventos y actividades de esta semana que vayan a necesitar protección policial en Madrid. En la planificación correspondiente a la semana actual, aparecen destacados algunos encuentros deportivos que vayan a necesitar el despliegue de algunas de las unidades policiales.
Así, está reflejado el partido entre Getafe y Córdoba de ayer, o el Real Madrid-Melilla del jueves. Los eventos, en su totalidad, son de carácter deportivo, ya que son muchos los partidos de fútbol que se jugarán esta semana en la capital.
Sin embargo, este calendario no refleja el partido de la final de la Copa Libertadores entre los equipos argentinos River Plate y Boca Juniors, una decisión que se conoció la semana pasada. Pero este encuentro ni siquiera es mencionado en el calendario.
El partido se trasladó al Santiago Bernabéu ya que la ciudad madrileña destaca por la "neutralidad" y la "tranquilidad necesaria" para poder jugarse el partido entre los equipos argentinos, según la Confederación Sudamericana del Fútbol.
Por su parte, las UIP ha dicho esta semana que la seguridad del partido está "asegurada". Aunque la Policía no ha hecho público el número de agentes desplegados en el dispositivo de seguridad, han declarado que éste estará "adaptado al riesgo de este partido".
Ataques de los aficionados
El partido entre el River Plate y el Boca Juniors tuvo que ser suspendido en Argentina tras los ataques entre los aficionados de ambos equipos. Antes de la suspensión del partido, el encuentro fue retrasado en dos ocasiones el mismo día.
El autobús del equipo Boca Juniors recibió ataques con piedras y gases lacrimógenos que afectaron a la salud de los jugadores.
Aunque las actuaciones fueron condenadas por futbolistas de todo el mundo, también se han alzado voces dentro del mundo del fútbol que han criticado la decisión de cambiar la sede del partido, ya que no todos los aficionados de los equipos pueden permitirse el dinero para viajar a Madrid para ver el partido de fútbol.
