La cadena vasca por el derecho a decidir encuentra menos apoyo en Navarra
Los promotores de Gure Esku Dago ya trabajan con la Ertzaintza para coordinar la seguridad, pero todavía no tienen el permiso del gobierno de Yolanda Barcina
La “Vía Catalana” que recorrió Cataluña el pasado 11 de septiembre para reclamar la independencia tendrá su imitación el próximo 8 de junio en el País Vasco y Navarra. Miles de personas unirán los 120 kilómetros que separan Pamplona de Durango (Vizcaya) para reivindicar el derecho a decidir de los “ciudadanos de Euskal Herria”. Más de 20.000 personas ya se han inscrito y han comprado un metro del recorrido.
Desde hace meses, los impulsores de la asociación Gure Esku Dago están promoviendo la participación en esta acción reivindicativa de los vecinos del País Vasco, de Navarra y también del País Vasco francés, los territorios que según los nacionalistas forman Euskal Herria.
El objetivo es reunir a unas 50.000 personas para cubrir los 120 kilómetros que separan Durango (en el centro geográfico de esa Euskal Herria) de Pamplona, la capital que reclaman los independentistas para un hipotético estado vasco soberano y unido.
En el acto público que celebraron a finales de marzo en Bilbao, los organizadores de esta cadena humana aseguraron que ya había 22.000 personas inscritas: cada participante “compra” un punto del recorrido por cinco euros, para financiar la campaña de organización.
Menos inscripciones en Navarra que en Vizcaya y Guipúzcoa
El Confidencial Autonómico ha podido saber que las inscripciones no están siendo homogéneas a lo largo del recorrido. Desde Gure Esku Dago explican que en el tramo que transcurre por territorio de la Comunidad Foral de Navarra hay menos kilómetros llenos que los que hay cubiertos en Vizcaya, desde Durango, y que en la provincia de Guipúzcoa, a medio camino hasta Pamplona.
Los organizadores achacan esta menor movilización por el momento a que la campaña de promoción por los pueblos comenzó más tarde en Navarra que en el País Vasco, y que por esoesta iniciativa a favor del derecho a decidir es menos conocida entre los navarros.
En todo caso, desde Gure Esku Dago aseguran que las inscripciones están aumentando notablemente tras el acto en Bilbao: “En algunos pueblos se están duplicando las inscripciones”.
Además, sus previsiones son optimistas y cuentan con que, en la última semana antes del 8 de junio -cuando se formará esa cadena humana entre Durango y Pamplona- muchas personas que no se hayan apuntado se decidan a acudir a reclamar el derecho de autodeterminación a este acto y lo hagan directamente, sin apuntarse “oficialmente” con la organización convocante.
Falta el permiso del gobierno de Navarra
Esta cadena vasca, a semejanza de la Vía Catalana que recorrió Cataluña de norte a sur el pasado 11 de septiembre, se formará por las carreteras. Sin embargo, en el caso vasco los organizadores no piensan cortar la circulación de las carreteras, sino simplemente ocupar los arcenes.
Para llevar a cabo esta “ocupación” de arcenes masiva, han pedido permiso a las autoridades vascas y navarras. En el caso de Euskadi, ya han recibido el visto bueno del gobierno vasco, y de hecho ya están trabajando con la Ertzaintza para coordinar el dispositivo de seguridad.
Sin embargo, el gobierno navarro de Yolanda Barcina (UPN) aún no ha respondido a su solicitud, y por lo tanto los impulsores de Gure Esku Dago se encuentran pendientes de ese permiso para concentrarse por las carreteras de Navarra hasta Pamplona.
