El gobierno vasco ayudará a los terroristas tras salir de la cárcel

Indignación entre ex escoltas por el plan de Urkullu para reinsertar etarras

Los profesionales que protegían a amenazados por ETA están haciendo circular críticas por el trato recibido tras el cese del terrorismo

Un cargo público amenazado por ETA, en una imagen de 2001 en la playa de La Concha con sus dos escoltas.
Un cargo público amenazado por ETA, en la playa de La Concha con sus dos escoltas.

El anuncio de ETA en octubre de 2011 de que había decidido el “cese definitivo de la actividad armada” provocó que la práctica totalidad de los concejales, diputados, jueces y otros cargos institucionales amenazados por la banda dejaran de tener protección de escoltas.

De esta forma, la mayoría de los 2.400 escoltas se quedaron sin trabajo gradualmente, aunque la disminución de protección a los amenazados en País Vasco y Navarra ya había comenzado hace un par de años en algunos casos.

Para dar una salida a estos escoltas que perdían su empleo, el Gobierno de España y el Ministerio del Interior concretamente prometieron un plan para recolocar a estos profesionales de la seguridad en puestos administrativos, en protección de mujeres maltratadas y, sobre todo, en labores de vigilancia de los centros penitenciarios.

El Confidencial Autonómico ya informó de que muchos de estos ex escoltas, concretamente los que viven en municipios vascos y navarros, estaban teniendo problemas para encontrar empleo en sus pueblos por rechazo o miedo de los vecinos.

Vivienda, empleo y ayuda psicológica

Hace unas semanas, el lehendakari Íñigo Urkullu anunció la puesta en marcha de un plan de reinserción para los presos de ETA que salen de la cárcel. Este plan ofrece a los etarras que se acojan a él dos años de cobertura institucional, que se traduce en asesoramiento personal y legal, apoyo psicológico y ayuda para encontrar un empleo y una vivienda.

Este programa del Gobierno Vasco ha provocado el enfado de asociaciones de víctimas del terrorismo, pero no sólo a ellas. ECA ha podido saber que entre ex escoltas que se quedaron sin empleo tras el anuncio del cese del terrorismo de ETA también se ha extendido una profunda indignación por el ofrecimiento de Urkullu a los etarras que van abandonando las cárceles.

Desde hace varias semanas está circulando por WhatsApp y por otros medios una grabación en la que uno de estos profesionales de la seguridad privada que dedicó años a proteger a una persona amenazada por la banda terrorista ETA comenta la reacción que le ha producido conocer el plan de Íñigo Urkullu para ayudar a los ex reclusos.

“Eso es de vergüenza”: así define este ex escolta el anuncio del Gobierno Vasco de que “va a buscar una recolocación digna y unas viviendas a buen precio para los etarras que vayan saliendo de la cárcel cumpliendo sus penas”, según las propias palabras de este profesional de la seguridad personal.

A los que trabajamos por España se nos da la espalda”

La queja principal es que a muchos de los escoltas que trabajaron hasta hace unos años en el País Vasco y Navarra “ahora mismo se nos niega una recolocación a la mayoría […] porque el gobierno central dice que se nos ha pagado por nuestro trabajo y que no tiene ninguna deuda con nosotros”.

Frente a ese sentimiento de haber quedado abandonados por las instituciones tras quedarse sin empleo por la reducción de las medidas de protección a las personas amenazadas por ETA, este ex escolta ve con indignación la ayuda del Gobierno Vasco a los presos etarras: “Osea que a los que trabajamos por España, defendimos la libertad en esa parte del territorio, se nos da la espalda, y a los hijos de la gran puta (permitidme la expresión) que mataron, asesinaron, que no tuvieron ningún temor en hacer tropelías, a esas personas que luchaban contra España, ¿se las va a recolocar con el dinero de los españoles?”.

 

En el audio al que ha tenido acceso El Confidencial Autonómico este ex escolta continúa, muy indignado, pidiendo que se difunda rápidamente este hecho, ya que “el presidente Urkullu, el presidente de la comunidad autónoma, con lo que quiere recolocar este señor es mi dinero, quiere recolocar a los asesinos, a los sinvergüenzas que querían romper y quieren romper España”.

Ante esas ayudas económicas a los terroristas que salgan de la cárcel, los ex escoltas que están haciendo circular este testimonio por WhatsApp y otros medios se quejan de que muchos de los que no han sido recolocados están pasando por una situación muy complicada: “Tengo compañeros que están buscando en los cubos de la basura, que están pasando hambre”.

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