En su discurso de ingreso en la Real Academia de Doctores de España

Un arqueólogo confirma las raíces celtas de la literatura y la mitología vascas

Martín Almagro Gorbea destaca que los prejuicios ideológicos han hecho que sólo se hable del origen euskaldún de esta cultura

Jura de Jaun Zuria como señor de Vizcaya.
Jura de Jaun Zuria como señor de Vizcaya.

Se suele considerar a la lengua, la literatura y la mitología vasca como totalmente separada de la castellana y con orígenes distintos. Sin embargo, un arqueólogo e historiador que ha ingresado en la Real Academia de Doctores de España desgranó en su discurso los datos científicos que avalan que ambas tienen raíces celtas.

Martín Almagro Gorbea, arqueólogo, historiador y académico de número de la Real Academia de la Historia, ha ingresado como miembro de número de la Real Academia de Doctores de España. Esta corporación incluye secciones de Teología, Humanidades, Derecho, Medicina, Ciencias Experimentales, Farmacia, Ciencias Políticas...

En su discurso, Almagro habló de “Las raíces celtas de la literatura castellana”. Este catedrático ha estudiado los últimos milenos antes de Cristo en la Península Ibérica y el proceso de formación de los pueblos iberos, celtas, tartesios y vascos.

Según explicó en su discurso, las pruebas arqueológicas, literarias, antropológicas y de otras ciencias indican que los celtas formaron la base étnica y cultural de todo el occidente de Europa. En el caso de la Península Ibérica estas poblaciones celtas se extendieron sobre todo desde Galicia hasta el País Vasco.

Sobre el caso de la cultura, literatura y mitología vascas, Martín Almagro afirmó que diversos relatos histórico-míticas sobre el origen de los señores de Vizcaya confirman el “profundo carácter celta del País Vasco”.

La leyenda del primer señor de Vizcaya

Esto se ve, por ejemplo, en el relato de Jaun Zuria: el mítico primer señor de Vizcaya descendía, según la leyenda, de una deidad precristiana y una princesa escocesa que lideró a los vizcaínos en una batalla contra asturianos y leoneses.

Para Martín Almagro, de este personaje histórico-mítico fundador de una dinastía y de un pequeño estado existen varias versiones a partir de un “rikx” o rey celta. También existen otros elementos de esa mitología vasca, como los ritos de entronización en árboles sagrados como el de Guernica, que son característicos de la religión y la cultura celtas.

Este esquema de tradición también sería el de Sancho Abarca en Navarra, y el de antiguos cantares de gesta castellanos de ese mismo período y con protagonistas y argumentos parecidos. El nuevo académico de la Real Academia de Doctores de España señaló que muy similares son el Canta de Fernán González, el Cantar de los Siete Infantas de Salas, la Gesta de las Mocedades de Rodrigo y algunos pasajes del Cantar de Mío Cid.

Una de las conclusiones que expuso Martín Almagro es que la literatura del País Vasco “afronta la dificultad de que la religión y los mitos atribuidos a los vascones no se han diferenciado de los pertenecientes a los pueblos celtas que habitaban el territorio vasco en la antigüedad, y la misma confusión se observa en las creaciones literarias”.

Como en realidad los vascones habitaron las áreas del norte de Navarra hasta el Pirineo Central y parte de la Aquitania francesa, “gran parte de lo que se considera literatura vasca, pues se atribuye sin más a la tradición euscalduna, forma parte de la literatura de la Hispania Celtica, hecho acorde con el carácter celta de las poblaciones del País Vasco en la antigüedad”.

 

Los “prejuicios ideológicos” en favor de lo euskaldún

Almagro denunció que esta confusión se debe a “prejuicios ideológicos”, que han hecho que sin contemplar los datos científicos que ofrece el análisis de estas narraciones histórico-míticas se considere a todas las leyendas vascas de origen euskaldún, frente a las evidencias de que son de inspiración celta.

“En esta literatura celto-vasca aparecen númenes y dioses antropomorfos, gigantes y animales característicos de la religión celta, el caballo, el toro, el jabalí, el carnero, la cabra, el perro, la serpiente, el buitre, etc., además de monstruos míticos, como el dragón. También son celtas los gentiles y moros y las lamiak o lamias, seres femeninos con cuerpo de mujer y extremidades inferiores de pez como las sirenas que habitaban las fuentes, ríos y cuevas”, explicó Almagro en su discurso ante la Real Academia de Doctores de España.

Concluyó que todas estas narraciones histórico-míticas celto-vascas constituyen “una importante aportación para conocer los verdaderos orígenes de la literatura vasca al margen de los tópicos preestablecidos y, en un sentido más general, ilumina los complejos orígenes de la literatura castellana, entre los que hay que incluir estos precedentes celtas que hasta ahora habían pasado desapercibidos”.

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