La presidenta de Navarra y candidata del PSOE a la reelección, María Chivite, tiene la previsión de ser la primera fuerza en esta región tras las elecciones del próximo 28 de mayo, pidiendo el voto, incluso de personas que nunca han votado a los socialistas, para que el Gobierno foral no tenga "dependencias externas" como Bildu u otras formaciones.
Así lo ha dicho Chivite durante su intervención en el desayuno informativo de Europa Press el mismo día que comienza la campaña para estas elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo.
La candidata socialista cree que las encuestas avalan su aspiración de ser la primera fuerza en Navarra.
Y según sus estimaciones, UPN dejará de ser la primera fuerza en Navarra, aunque sí que prevé que el Partido Popular tenga una subida considerable respecto a los comicios del año 2019, aunque no le será suficiente para conseguir Gobierno.
"La mayoría navarra no nacionalista tiene la garantía del equilibrio, por eso vamos a ampliar la fuerza social para no tener que depender de formaciones externas", defendió Chivite, que ha dicho enfocar la campaña "desde la ambición, pero desde haber leído las encuestas".
Abandonos en la sala
Chivite no solo estuvo acompañada por parte del Ejecutivo. También acudieron Ander Gil, presidente del Senado, y de Patxi López, portavoz del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados y ex lehendakari del Gobierno Vasco. En este sentido y según pudo comprobar ECA, tras su discurso, ambos se levantaron de sus respectivos asientos y abandonaron la sala, dejando en cierta mane atónitos a los presentes.
“Desconozco si Patxi López tenía que acudir a otro evento, pero Gil no tenía excusa para abandonar el desayuno”, sentenciaron a ECA fuentes cercanas a María Chivite.
