Así se borran las ‘firmas’ de ETA en las ciudades de Navarra. Un acuerdo del Gobierno foral garantiza que desaparezcan las pintadas cuando un Ayuntamiento ‘rebelde’ no quiere limpiarlas

En muchos rincones de Navarra se pueden ver frases y símbolos de exaltación del terrorismo que ningún servicio de limpieza municipal retira, bien sea por desidia administrativa o por presiones de simpatizantes con ETA. En los últimos meses, se han limpiado una decena de pintadas gracias a un protocolo suscrito en noviembre entre el Gobierno de Navarra y la Delegación del Gobierno.

Según explican fuentes del Ejecutivo presidido por Yolanda Barcina (UPN) a El Confidencial Autonómico, el convenio se firmó en octubre y se ha aplicado en unas 10 ocasiones en las localidades de Arbizu y Etxarri-Aranatz, donde recientemente se han vuelto a escribir en varias fachadas mensajes de apoyo a ETA.

El acuerdo implica tanto a la Delegación del Gobierno como al Gobierno de Navarra y está pensado para terminar con la “duplicidad” que ha surgido en ocasiones. El objetivo es que desaparezcan todas las pintadas de exaltación del terrorismo, incluso aquellas que no son borradas por los Ayuntamientos.

El procedimiento habitual se abre cuando una autoridad competente da fe de que se han producido esas pintadas; por ejemplo, en un informe de la Guardia Civil. A continuación, la Delegación envía un requerimiento al consistorio correspondiente, que puede ignorarlo, como de hecho ha sucedido en algunas ocasiones.

Esta obligación está contemplada en el artículo 98 de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas.

Una vez se agota el plazo concedido para el borrado –que suele ser de un mes–, comienza el procedimiento. Varios operarios de una empresa contratada por el Gobierno de Navarra acuden al lugar de madrugada, escoltados por agentes de la Policía Foral, y limpian las pintadas.

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La casa de los Ulayar

A los pocos días de que se localizasen varias pintadas pro-etarras en la casa de los Ulayar, en Etxarri, el Ayuntamiento gobernado por Bildu ya había recibido el requerimiento para limpiarlas, aunque los antecedentes indicaban que no iba a encargarse de hacerlo.

Este fin de semana, varios familiares y vecinos de la localidad se han encargado de retirar los mensajes, antes de que haya tenido que intervenir la Delegación, puesto que no se habían agotado los plazos. Además de tapar las pintadas, han estampado decenas de manos blancas sobre la fachada, todo un símbolo.

En este acto han participado hijos y nietos de Jesús Ulayar, asesinado por ETA en 1979. También han estado miembros de Covite, como la vicepresidenta, Maite Pagazaurtundúa, que ha descrito lo sucedido en una entrada en el blog de la asociación de víctimas.

¿Quién lo paga?

El coste medio de estos trabajos ronda los 1.000 euros. El Gobierno de Navarra reclama su pago a los Ayuntamientos, que son quienes tienen que prestar ese servicio público de limpieza. En el caso de que no abonen la factura, se les descuenta de las transferencias del Fondo de Participación de las Haciendas Locales en los Tributos de Navarra.

Este procedimiento está pensado para los casos en los que las pintadas no desaparezcan, por el motivo que sea, hasta que es necesaria la intervención del Gobierno de Navarra.

Fuentes del Gobierno navarro indican que es una estrategia para “acabar con la tolerancia de ciertos Ayuntamientos”.

Navarra quiere erradicar así cualquier manifestación visual a favor de “terroristas, de organizaciones terroristas o de ensalzamiento del terrorismo”. Aseguran que su exhibición supone además “el menosprecio y la humillación de las víctimas”.