Así desaparece Carlos Fabra de la placa de una inauguración
Los casos de corrupción ha llevado a los tribunales, e incluso a la cárcel, a dirigentes políticos de toda España. Eso ha hecho que algunos ciudadanos reaccionen con indignación y traten de acabar con los signos de reconocimiento y distinción a estos políticos. Ocurrió con algunas placas de Jordi Pujol, en las que el ex presidente de la Generalitat de Cataluña perdió el “molt honorable”. Y ahora ha ocurrido con Carlos Fabra, quien fuera presidente de la Diputación de Castellón y que acaba de salir en libertad condicional. Fabra inauguró en 1995 la Ermita de San Cristóbal, en el municipio castellonés de Vall d’Alba. Pues bien: ahora, en la placa que recuerda ese acto de inauguración el nombre del entonces presidente de la Diputación de Castellón no se ve, al estar tapado con papeles o pintura blanca.
