Que pase el siguiente en Madrid
Se ha confirmado estos días que no, que la enésima estrategia del PSOE para evitar recurrir a un candidato paracaidista en las elecciones municipales por Madrid ha vuelto a fracasar. No hay más. La apuesta oficiosa que pretendía arrebatarle la mayoría a José Luis Martínez Almeida con un trabajo de pico y pala desde abajo llegó a tener nombre y apellidos: Mercedes González.
Ha sido concejal de Urbanismo durante seis años, curtida por tanto en la política municipal, y fue ascendida por Pedro Sánchez a delegada del Gobierno para Madrid en marzo de 2021 con el objetivo de darle visibilidad, mando en plaza, y rivalizar con su amigo Almeida (al parecer, los dos se llevan bastante bien). Hay que recordar que eso mismo hizo el PP con Cristina Cifuentes años atrás: antes de proponerla para presidenta de la Comunidad trabajó como delegada del gobierno en la capital.
Pues esta operación ha fracasado. La dirección del PSOE admite ya sin medias tintas que ese caballo no es ganador… a pesar del “desgaste” que Almeida confirma en las encuestas internas. El primer edil del PP baja en intención de voto, dicen los socialistas, pero ese porcentaje no lo aprovecha Mercedes González.
Así que si uno pregunta ahora qué sucederá con el candidato socialista para la capital se escucha lo mismo que desde hace 20 años: se va a recurrir a un candidato “de reconocido prestigio”. Es decir, se va a apostar por otro paracaidista. Otro fichaje estrella. El diario El País ha deslizado los nombres de tres ministros que estarían incluidos en ese casting de aspirantes: el de Presidencia, Félix Bolaños; la de Justicia, Pilar Llop; y la de Defensa, Margarita Robles.
Realmente, el nivel de desesperación del PSOE con Madrid debe ser similar, por ejemplo, al del PP con Barcelona. Sólo hay que ver lo que sucedió con el último experimento de Pedro Sánchez en la capital. Fue un desastre. El ex seleccionador de baloncesto Pepu Hernández cosechó en 2019 el peor resultado de los socialistas en toda la historia: cuarta fuerza política en el hemiciclo, cuarta, y sólo ocho concejales.
