Los antidisturbios municipales vigilan la venta ambulante en Madrid durante la Navidad
Policías de las Unidades Centrales de Seguridad (UCS) patrullan de paisano con el apoyo de agentes uniformados. Se han incautado de petardos ilegales
El nivel 4 de alerta antiterrorista ha provocado que en las calles de Madrid se hayan desplegado durante las fiestas de Navidad un mayor número de agentes de policía. En el dispositivo de seguridad participan también agentes de la Policía Municipal de Madrid, tanto de uniforme como vestidos de paisano.
El Confidencial Autonómico ha podido saber que estos días también se han desplegado en las calles de la capital efectivos de las Unidades Centrales de Seguridad: las UCS, los antidisturbios del cuerpo municipal que el gobierno de Manuela Carmena planteó suprimir primero, para lugaro apostar por reorientar sus tareas y que, por ejemplo, dejaran de actuar en desahucios de viviendas.
Fuentes internas de la Policía Municipal explican que agentes de las UCS están patrullando en el distrito Centro, sobre todo, para luchar contra la venta ambulante ilegal que prolifera especialmente en torno a la Navidad.
Los antidisturbios vigilan estos días estos delitos, y lo hacen de paisano para descubrir ‘in fraganti’ a los vendedores ilegales. Además, cuentan con el apoyo de patrullas y equipos de policías de uniforme que acuden a ayudarles en caso de que efectúen intervenciones.
Este despliegue ha dado sus frutos. Por ejemplo, el día 25 de diciembre efectivos de la Unidad Central de Seguridad 1 intervinieron 80.000 artículos pirotécnicos que se guardaban en un local del distrito Centro.
También intervinieron plantas de marihuana
Pero esta no ha sido la única intervención destacada de las UCS en estas fechas. Aparte del nuevo despliegue contra la venta ambulante, los miembros de la unidad antidisturbios incautaron decenas de plantas de marihuana en un local también del distrito Centro.
Tras recibir una denuncia de los vecinos, agentes de la UCS 2 entraron en el local y encontraron un cuarto en el que crecía un buen número de plantas de cannabis. El dueño del local tenía ese espacio perfectamente acondicionado con materiales aislantes, ventiladores y focos de luz para cultivar en secreto marihuana.
