¿A quién le niega el saludo el presidente riojano, Pedro Sanz?

Seis años sin estrechar la mano de su presidente. Ésa en la amarga queja de un párroco de Arnedo, en La Rioja, que ha recogido en una carta los motivos por los que el ‘popular’ Pedro Sanz, presidente autonómico, se niega a saludarle cuando ambos coinciden en algún acto oficial. La misiva, que puede leerse completa al término de estas líneas, comienza diciendo que Sanz le ha “negado la mano una vez más”. ¿A qué atribuye este gesto el damnificado? “Porque no llevaba sotana, como los curas buenos, y por eso no me conocía”, escribe. “Y que me metía en política”. El cura explica que después de aquellas palabras, Sanz “se marchó tan satisfecho, farfullando: ‘Ya era hora de que alguno le dijera las cosas claras’”. “Desde entonces yo he procurado no interferir en sus venidas a nuestra Ciudad [Arnedo] en fiestas por motivos religiosos”, comenta el religioso y añade: “Sé que somos varios los compañeros curas a los que usted niega la mano y/o el saludo”. “Le manifiesto públicamente que mientras yo sea quien dirige esta comunidad cristiana de Arnedo, no será bien recibido en nuestra parroquia si me niega el saludo”, concluye el párroco. Al resto de la clase política también les obsequia con una recomendación: “No vayan, por favor, más a las misas de los pueblos, que no es el lugar de los mítines. (...) Y si vienen, vengan humildemente”. ¿Qué le parecerá a Pedro Sanz la misiva de este sacerdote, de las parroquias de los santos Cosme, Damián y Tomás Apóstol, de Arnedo?