Miguel Ángel Revilla decide operarse del riñón en el Hospital Universitario de Valdecilla, en Santander. Tras la intervención quirúrgica decidirá si se presenta o no a las autonómicas
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha decidido esperar a ver los resultados de su operación de riñón para decidir si vuelve a participar en las elecciones autonómicas. La intervención quirúrgica tendrá lugar en el Hospital Universitario de Valdecilla, situado en Santander. "Cantabria tendrá uno de los mejores hospitales de España y del mundo". Con estas palabras defendió Revilla, el pasado 25 de septiembre, el proyecto emprendido por el gobierno autonómico para la modernización del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, cuyas obras de remodelación finalizarán en dieciocho meses. Mes y medio después de realizar estas declaraciones, el presidente de Cantabria ha anunciado que no decidirá si se presenta o a la reelección de su cargo en las elecciones autonómicas de 2011 hasta conocer los resultados de una prueba "que me tienen que hacer en un sitio donde hay aparatos". Según ha podido saber El Confidencial Autonómico, la prueba a la que se refiere Revilla se trata de una operación en el riñón, órgano en el que el presidente autonómico tiene "un problema crónico", tal y como él mismo ha reconocido. Fuentes cercanas al entorno del dirigente cántabro explican a ECA que "Miguel Ángel quiere operarse en Cantabria, más concretamente en el Hospital de Valdecilla". La decisión de Revila tiene que ver con "su deseo de demostrar que la sanidad pública en Cantabria está entre las mejores de España". Además, "él ya ha demostrado su confianza en este hospital". Este confidencial se ha puesto en contacto con el Gobierno cántabro para confirmar las explicaciones del entorno de Revilla. Fuentes autorizadas de la administración han reconocido que "el presidente se operará en el Hospital de Valdecilla", aunque la fecha para la intervención "aún no está decidida". A la espera de saber en qué fecha pasará Revilla por el quirófano, parece que el presidente cántabro, que ya ha sido intervenido tres veces del riñón, quiere demostrar su compromiso y confianza con la sanidad pública de su comunidad.
