Ximo Puig apuesta por la presencia valenciana en el Gobierno de Pedro Sánchez
En medio de las quinielas en el PSOE que sitúan al ex presidente de la Generalitat como ministro
- Movimientos de Ximo Puig tras el 28-M
- Presencia valenciana en el Gobierno de Sánchez
- Ximo Puig: "ministrable"
- Rencillas pasadas y futuro del PSPV
- Objetivo: 2027
Aunque Ximo Puig obtuvo un buen resultado el 28-M, pues subió cuatro escaños, no se pudo reeditar el tripartito de izquierdas PSPV-Compromís-Podemos. La Generalitat Valenciana pasó a manos de Carlos Mazón (PP), que pactó con Vox, y también los ayuntamientos principales dejaron de estar en manos de los socialistas o de Compromís: Valencia, Castellón…
Algunos pensaban que tal vez Ximo Puig asumiera la derrota, incluso marchándose de la política. “Eso es no conocer a Ximo Puig”, aseguran fuentes cercanas al expresidente, “pues sabe jugar al ajedrez político como nadie, y no huye ante resultados adversos”.
Fuera por su edad (nació en Morella, Castellón, en 1959) o por su dilatada carrera política, tanto dentro de su partido como fuera, había dudas sobre qué papel desempeñaría al pasar a la oposición.
Movimientos de Ximo Puig tras el 28-M
Puig fue a recoger su acta de diputado en las Cortes Valencianas, intervino en la investidura de Carlos Mazón, se hizo con el puesto de senador territorial y ha activado el estatuto de expresidente, con dos asesores y un conductor para tener un mínimo de soporte en su actividad política.
Además, designó a la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, como vicesecretaria general del PSPV, que hasta ahora ha gozado de la confianza de Pedro Sánchez, y situándola así como posible sucesora al frente del PSPV.
“Ximo Puig sabe nada entre dos aguas: acercarse a Pedro Sánchez y controlar el partido en Valencia, por lo que pueda pasar, y desde luego no da ‘puntada sin hilo’”, afirman a este digital.
Las elecciones generales han arrojado un resultado por el que Pedro Sánchez puede mantenerse en La Moncloa. No será fácil, puesto que debe conseguir el apoyo de diversas fuerzas del arco parlamentario (PNV, Bildu, ERC, Junts...), pero no imposible, especialmente viendo que el candidato del PP, Alberto Núñez Feijóo, no parece tener opciones de lograr una mayoría.
Presencia valenciana en el Gobierno de Sánchez
En el caso de que Sánchez siga en La Moncloa, Puig ya ha trasladado a su entorno su intención de jugar fuerte para la presencia valenciana en el ejecutivo central.
Así, el expresidente de la Generalitat considera vital que, tras perder el Gobierno valenciano, pueda haber dirigentes del PSPV en Madrid que tengan responsabilidades y presencia, con el objetivo de ejercer de contrapeso al nuevo dominio institucional logrado por el PP de Carlos Mazón.
Ximo Puig: "ministrable"
En el PSPV también se especula con la posibilidad de que Puig pueda ser ministro. El expresidente siempre se desmarcó de esto mientras estuvo al frente del Palau de la Generalitat, pero algunos consideran que sería una "buena oportunidad" para el líder de los socialistas valencianos y también para Pedro Sánchez.
En su entorno creen que Puig posee un buen perfil para áreas como Política Territorial o Industria. La primera, por su talante federalista y su conocimiento de las formaciones catalanas, con quien siempre ha mantenido un tono dialogante; la segunda, por sus últimas gestiones al frente del Gobierno valenciano para atraer fuertes inversiones como la de la gigafactoría de Volkswagen a Sagunto.
De hecho, en el PSPV consideran que si Puig fuera ministro en esta competencia, esto serviría para mantener viva la presencia de la gestión del anterior gobierno para evitar que Mazón se apropiara en exclusiva de hitos del Botánico (gobierno tripartito de izquierdas que ha gobernado durante ocho años).
Rencillas pasadas y futuro del PSPV
En la federación valenciana -y también el propio Puig- saben que no es fácil alcanzar una cartera ministerial. De hecho, hay quien cree que, pese a que el expresidente de la Generalitat es un político valorado en el ámbito nacional, será difícil que Sánchez decida darle esa confianza por las rencillas pasadas.
Eso sí, el nombramiento también abriría la puerta a una renovación en el liderazgo del PSPV que el presidente del Gobierno tendría más fácil controlar.
Objetivo: 2027
En cualquier caso, y más allá de las posibilidades de Puig de ser ministro, la prioridad estratégica del líder del PSPV irá dirigida a que exista una presencia potente de valencianos en el gobierno de España para tratar de no ceder terreno e incluso recuperarlo frente a la gestión del Consell PP-Vox.
Es más, los socialistas valencianos consideran clave que exista ese tipo de representatividad por parte del PSPV en el Gobierno central de cara a darle la vuelta a la situación en las elecciones de 2027.
