Advertencia del Gobierno a Artur Mas: “No queremos ver a Francesc Homs leyendo resultados del 9-N”
Preocupa menos que la votación sea organizada por la ANC y Òmnium Cultural. Sería una implicación explícita de la Generalitat en el referéndum y tendría consecuencias legales.
El desafío soberanista de Artur Mas afronta su semana definitiva con un segundo recurso del Gobierno contra la consulta de la Generalitat. Desde Moncloa consideran que el nuevo revés sufrido por el president será el definitivo y, finalmente, “no hará ningún amago de referéndum”. No obstante, desde Moncloa han querido mandar un nuevo aviso al equipo del dirigente autonómico.
Según explican a El Confidencial Digital dirigentes del PP catalán con hilo directo con Moncloa, las conversaciones entre el Gobierno central y la Generalitat se han seguido produciendo durante la última semana, con un objetivo claro: evitar que se le dé “cualquier atisbo de oficialidad” a cualquier votación sobre la independencia de Cataluña.
En este sentido, las fuentes consultadas explican que, desde el Ejecutivo, se ha advertido a Mas de las “consecuencias legales” que podría tener para la Generalitat dar soporte logístico y mediático una consulta “que volverá a ser declarada ilegal por el Tribunal Constitucional”.
“Homs no puede salir a hacer públicos los resultados”
Desde el Gobierno reconocen que “lo que nadie quiere ver” es al portavoz de la Generalitat, Francesc Homs, “saliendo a las 10 de la noche del 9 de noviembre anunciando los resultados del referéndum, por muy simbólicos que sean”.
Las fuentes consultadas añaden que “una comparecencia así implicaría la participación del Gobierno de Mas en algo que ha sido prohibido y se considera fuera de la ley, por lo que la Generalitat debería asumir las consecuencias”.
“Si quieren, que lo monten ANC y Òmnium”
En el Ejecutivo, no obstante, confían en que Artur Mas “no llegue a ese extremo”. Sin embargo, dan por casi segura la celebración de “un simulacro de consulta” liderado por la Asamblea Nacional Catalana y Òmnium Cultural.
En ese escenario, las fuentes consultadas explican que cualquier dato o valoración que hagan estas dos plataformas “no serán más que palabras”, ya que “ni la consulta ni sus resultados tendrá ningún tipo de trascendencia política ni legislativa”.
