Un programa de animación a la lectura a los presos de Castilla-La Mancha

Hace unos meses rubricaron el acuerdo el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y el consejero de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, Ángel Felpeto. Tendrá vigor hasta el 31 de diciembre, pero se podrá prorrogar por períodos anuales por acuerdo de ambas partes.

Según el convenio, las administraciones estatal y autonómica se comprometen a poner en marcha “programas de animación a la lectura por medio nde actividades de creación y difusión cultural, así como el fomento de la lectura asociado a la promoción de las bibliotecas, todo ello dirigido a las personas internadas en los centros penitenciarios de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha”.

El gobierno de Emiliano García-Page será el encargado de realizar en el interior de las cárceles de la región actividades de animación a la lectura entre la población recluso. La hará a través del Programa Biblioteca Solidaria y los voluntarios que participan en él.

Estos voluntarios que tratarán con los presos para fomentar entre ellos la lectura tendrán que recibir cursos de formación para que “adquieran los conocimientos necesarios del ámbito penitenciario para el desarrollo de su labor”. Además, el Ministerio del Interior tendrá que facilitarles el acceso a los centros penitenciarios.

Mediante este programa para animar a la lectura a los internos en las cárceles, la Consejería de Educación de Castilla-La Mancha pondrá a disposición de los presos los libros existentes en el Programa Biblioteca Solidaria.

También realizará actividades culturales en las prisiones, como encuentros con escritores, exposiciones, narraciones orales... e incluso colaborará para editar revistas, boletines y publicaciones que ayuden a animar a la lectura y a la cultura en general entre la población reclusa.