Han pasado casi seis meses desde que el volcán de La Palma entró en erupción. Miles de residentes fueron evacuados y tuvieron que abandonar sus hogares ante la amenaza de Cumbrevieja. Esto provocó que los palmeros tuvieran que hospedarse en casa de familiares, naves u hoteles durante un tiempo indefinido. A pesar de que no hubo que lamentar víctimas, la catástrofe ha causado daños psicológicos tanto a niños como a adultos.

A los quince días de que comenzase la erupción, Cruz Roja puso a disposición de los afectados un servicio de apoyo psicológico y de acompañamiento emocional llamado “Cruz Roja Te Escucha La Palma”. El objetivo de esta plataforma era proporcionar una escucha activa para aliviar el malestar y el sufrimiento de las personas afectadas.

Actualmente este servicio continúa activo y esta ayuda psicológica se ha llevado a cabo tanto por teléfono como en persona. Muchos de ellos prefieren actuar de forma anónima porque les resulta muy violento acudir a los servicios sociales, han señalado fuentes de la ONG a Confidencial Digital.

Otros, en cambio, prefieren acudir de forma presencial y encontrarse cara a cara con un profesional. Durante estas sesiones, que son individuales, ayudan a tratar a la víctima a superar la situación ya que, aunque sean pérdidas materiales, para ellos son sus recuerdos y su vida pasada, por lo que sienten algo similar a la “pérdida de un familiar”. A ello, han añadido que la gente ya estaba mal psicológicamente desde antes de la erupción del volcán, y esto ha sido “la gota que ha colmado el vaso”. 

Hasta la fecha, el proyecto "Cruz Roja Te Escucha" ha atendido a 160 personas, de las cuales, 80 han solicitado que se les realice un seguimiento. Según el caso, a algunas personas se les atiende una vez por semana y a otras, una vez cada dos. Fue después de Navidad cuando “casi todo el mundo” solicitaba la ayuda psicológica de forma presencial. “Se notó el aumento de las solicitudes cuando se apagó el volcán”, han matizado.

Los nuevos talleres comenzarán a partir del 21 de marzo

Para continuar ayudando, Cruz Roja va a comenzar un nuevo proyectoen el que profesionales de la psicología se encargarán de enseñar a todo aquel que lo desee a gestionar sus emociones, tanto a niños como a adultos. De esta forma, podrán aplicar los consejos posteriormente en su día a día. 

Estos talleres comenzarán a partir del día 21 de marzo y se impartirán de forma presencial. Por el momento, es un proyecto piloto, es decir, primero lo quieren probar con aquellas personas que ya han solicitado la ayuda psicológica, aunque está previsto que se extienda a más personas.

Los niños también se han visto afectados

Los menores también se han sentido desubicados en esta catástrofe al no entender qué era lo que estaba ocurriendo. Muchos de ellos se han visto obligados a cambiar de colegio porque el suyo ha quedado bajo las cenizas o destruido. 

Según ha explicado la ONG, le tenían pavor al volcán. “El rugido, los temblores y el cambio de situación de un día para otro les generó miedo y los padres no sabían como responder a sus preguntas”, por lo que necesitaban consejos de profesionales. Muchos de ellos tenían pesadillas, han relatado.

Por otro lado, se están impartiendo clases de apoyo a niños de primero a cuarto de la ESO para que puedan recuperar el temario perdido o para ayudarles a concentrarse. 

Personas alojadas en hoteles

Todavía hay familias sin hogar. La ONG tiene alojadas a un total de 460 personas en tres hoteles. Estas personas pertenecen a tres barrios concretos de la isla de La Palma que son: Las Manchas, que pertenece a los municipios de El Paso y Los Llanos de Aridane, El Remo y el pueblo costero de La Bombilla. 

Los tres hoteles en los que se están hospedando los damnificados del volcán son el hotel Fuencaliente, que aloja a 286 personas, el H10 Taburiente Playa, que cobija a 120 y, por último, el hotel Valle de Aridane, en el que descansan 54 palmeros. Todos ellos tienen entre tres y cuatro estrellas. 

Las ayudas económicas

Desde Cruz Roja siguen ofreciendo ayudas económicas y bienes. Además, están asistiendo a todas aquellas personas que necesitan rehabilitar las casas que han quedado agrietadas o se han derrumbado. Para ello, les ayudan a buscar a un arquitecto y posteriormente, le abonan la cantidad necesaria a través de una transferencia. 

En cuanto a las ayudas gubernamentales, han manifestado que, por el momento, se están utilizando para mejorar y reparar las comunicaciones en las carreteras afectadas y que, por ahora, no se han comenzado a restaurar hogares.

Reparar las comunicaciones también es importante porque, según han apuntado, ir de un pueblo a otro hoy en día supone un trayecto de dos horas que antes era de quince minutos y esto supone un gran gasto económico ya que el precio de la gasolina hoy en día está “por las nubes”.