Gran Canaria se convierte en el ‘campo de pruebas’ para los mediadores extrajudiciales antes de que se aplique la nueva normativa. Podrán acudir a ellos 4 millones de autónomos y pymes

Una de las primeras regiones en conocer los detalles de la nueva normativa sobre la mediación fuera de los tribunales serán las Islas Canarias. Julio Fuentes, subdirector general de Política Legislativa del Ministerio de Justicia y responsable de la redacción de ese reglamento, ha participado en una charla en Las Palmas en la que ha explicado las atribuciones de esta nueva figura profesional, a punto de entrar en vigor.

Ejercer como mediador extrajudicial permitirá agilizar la resolución de conflictos y reducir el colapso en los tribunales. Ése es el papel fundamental de esta figura dentro del reglamento que acompaña a la Ley de Emprendedores y que está a punto de ser aprobado. Según ha podido saber El Confidencial Autonómico, Gran Canaria será la sede de varios cursos orientado a la preparación de mediadores próximamente.

El autor del reglamento que desarrolla las competencias de los mediadores es Julio Fuentes, subdirector general de Política Legislativa del Ministerio de Justicia. Él mismo fue el encargado de adelantar a los asistentes a una conferencia del Colegio de Abogados de Las Palmas cómo funcionará este nuevo actor dentro del sistema judicial.

Aunque la legislación en la que se determina la creación de los mediadores extrajudiciales data de 2012, hasta ahora el reglamento para establecer sus competencias estaba pendiente de ser desarrollado. Quienes estén interesados en prepararse profesionalmente y ‘sobre el terreno’ para ejercer esta nueva actividad podrán hacerlo en las próximas semanas.

Los ministerios de Industria y Justicia calculan que la figura de mediador puede evitar que lleguen a los juzgados entre 12.000 y 14.000 casos relacionados con concurso de acreedores. Podrán hacer uso de sus atribuciones más de 4 millones de pequeñas empresas, sumando pymes y autónomos. Esos problemas podrían resolverse en un plazo medio de tres meses y a un menor coste que otros procedimientos ya existentes.

Qué hacen los mediadores

La mediación está diseñada para impedir que un conflicto –civil o mercantil– tenga que acabar obligatoriamente en los tribunales. Están excluidos de sus competencias los asuntos penales, laborales, de consumo y con las administraciones públicas.

Este proceso es una forma voluntaria de resolución de diferencias entre dos partes en la que interviene una tercera persona, cualificada y neutral. Se trata del mediador, que no tiene por qué estar vinculado al ámbito legal.

¿Cuáles son las diferencias entre mediación y arbitraje? El mediador no tiene capacidad de decisión a la hora de resolver el conflicto, como sí ocurre en el arbitraje. En estos casos, la determinación final queda en manos de las partes.

 

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