La casa-cuartel prometida a la Guardia Civil de Mallorca, y que tenía que haber estado lista antes del atentado de ETA, tardará dos años más: “sólo están los cimientos”
Cuando ETA hizo explotar una bomba-lapa junto al cuartel de la Guardia Civil de Palmanova el 30 de julio de 2009, los agentes de la Benemérita, que perdieron a dos compañeros en el atentado, ya tenían que haber sido trasladados a una nueva-casa cuartel prometida por el ministerio del Interior a comienzos de 2008. Según ha podido saber El Confidencial Autonómico, el plazo para la finalización de las obras de la nueva sede de la Guardia Civil en Calvià expiró en junio de 2009, un mes antes de que ETA hiciera estallar dos artefactos en las dos dependencias de la Benemérita en el municipio. La primera explosión causó la muerte de los agentes Carlos Sáez de Tejada y a Diego Salva Lezaun. Ambos guardias civiles trabajaban en el cuartel que debía haber estado cerrado en el momento del ataque terrorista, y al que siguen acudiendo sus compañeros hasta que se confirme el traslado a la nueva estación de autobuses del municipio. Allí permanecerán durante "al menos dos años, hasta que acaben las obras de la casa-cuartel que Rubalcaba nos prometió para mediados de 2009", explica a este confidencial una voz autorizada de la Guardia Civil de Palma. La misma fuente explica que "la iniciativa de las nuevas dependencias parte del ministerio del Interior, que tuvo una serie de reuniones con el ayuntamiento de Calvià, que finalmente cedió unos terrenos en Santa Ponsa, junto a la comisaría de Policía, en octubre de 2008". Sin embargo, después de obtener las licencias de obra, poco se ha avanzado en el terreno. ECA ha podido presenciar in situ el 'desarrollo' del proyecto, y ha confirmado las quejas de la Benemérita, que aseguró: "el edificio sólo está cimentado y ya hay hechos algunos sótanos, pero la casa-cuartel aún no tiene construido ni el primer piso". Vea a continuación las fotos, tomadas por este diario, que demuestran el retraso del proyecto:
