Una cabeza de ajo, supuesto amuleto en la sala de máquinas de la fragata de Rota
Algunos militares apuntan que podría tratarse de una costumbre naval
La fragata ‘Santa María’ llegó el pasado jueves a la base naval de Rota, y puso así punto final al despliegue de varios meses con la ‘Operación Atalanta’ de lucha contra la piratería en las aguas del océano Índico y el Golfo de Adén, en torno al cuerno de África.
Días antes de llegar a casa, el Estado Mayor de la Defensa publicó en Facebook tres fotos de la fragata para ilustrar cómo “el personal de máquinas de la fragata Santa María realiza una labor diaria fundamental para asegurar los servicios básicos a bordo y mantener los equipos de energía y propulsión del buque alistados #24siete durante todo el despliegue en #OpAtalanta”.
Una de las imágenes ha sido muy comentada entre militares. Muestra un panel lleno de botones e indicadores sobre las turbinas, el nivel de aceite, el combustible... Una suboficial de la Armada se encuentra frente al panel.
En la foto, un detalle ha causado cierta sorpresa. De una agarradera cuelga, con un alambre, una cabeza de ajo.
¿Qué hace una cabeza de ajo en la sala de máquinas de una fragata? Algunos militares apuntan que podría tratarse de una costumbre naval, procedente de los antiguos amuletos que usaban los marineros más supersticiosos para tratar de garantizar una buena singladura por los mares.
El ajo es uno de esos amuletos utilizados por los marinos. En la Armada se han usado también otros.
En la fragata ‘Almirante Juan de Borbón’, con base en Ferrol, había hace unos años una figura de una bruja montada en una escoba. Estaba colgada en el Centro de Información y Combate (CIC), el centro táctico que proporciona información procesada para el mando y control del espacio de batalla cercano o área de operaciones.
La fragata ‘Santa María’ sufrió un percance antes de participar en la ‘Operación Atalanta’. Días antes de zarpar, cuando se encontraba amarrada en Rota, se declaró un incendio en su interior. La Policía Naval, los bomberos de la base y la dotación del buque sofocaron el incendio.
El fuego arrasó el hangar, destinado a helicópteros y drones. La Armada abrió una investigación para determinar las causas y estudió los daños. Se retrasó ligeramente la partida para incorporarse al despliegue europeo contra la piratería frente a las costas de Somalia.
Tampoco tuvo buena suerte la fragata ‘Numancia’, a la que la ‘Santa María’ iba a dar el relevo en la ‘Operación Atalanta’. Después de haber retrasado su vuelta a España por el incendio en la ‘Santa María’, la ‘Numancia’ tuvo que permanecer diez días en un puerto de Yibuti para que le arreglaran una avería en la línea de ejes.
