Griñán quiere forzar la entrada de IU en el Gobierno andaluz. Utilizará el argumento de que en 1994 se negaron a pactar con el PSOE y perdieron 17 escaños dos años después
El PSOE sabe que IU está dispuesta a negociar un pacto de Gobierno para evitar la llegada del PP a la Junta. Sin embargo, José Antonio Griñán teme que Diego Valderas se cierre en banda en su postura de "no querer sillones" y, para convencerle, le recordará que su partido perdió 17 escaños en 1.996 dos años después de negarse a aceptar un pacto similar.
Según ha sabido El Confidencial Autonómico, PSOE e IU se sentarán a hablar después de la huelga general de mañana jueves, ya que para Valderas “la movilización de los trabajadores contra la reforma de Rajoy” es el asunto prioritario de su partido en estos momentos, por encima del futuro de la Junta y su posible pacto con los socialistas.
De cara a esos encuentros, José Antonio Griñán es consciente de que el coordinador de IU pondrá más de una condición a su apoyo en la sesión de investidura –como no entrar en el Ejecutivo o que se introduzca el programa de los comunistas en el plan de Gobierno-, y está preparando un argumentario “contundente” para convencer a su interlocutor.
Además de insistir en la necesidad de “hacer de barrera en Andalucía a las políticas restrictivas del PP”, el presidente en funciones de la Junta “recordará a Valderas las consecuencias políticas que tuvo para IU no apoyar al PSOE en la región hace seis años”.
En concreto, Griñán echará en cara al coordinador de IU que en 1.994, cuando su obtuvo los mejores resultados en las andaluzas de su historia, con 20 diputados, rechazó la oferta del PSOE de entrar a formar parte del Gobierno, siguiendo la estrategia de Anguita de hacer pinza con el PP para desbancar a Felipe González.
Dos años después de no fructificar ese pacto, y cansado de que IU y PP echarán atrás todas sus propuestas en el parlamento andaluz, el entonces presidente Manuel Chaves convocó unas elecciones adelantadas que fueros terribles para los comunistas: “pasaron de 20 a tan sólo tres diputados”.
Pese a que las circunstancias han cambiado, y la estrategia de Cayo Lara no es la misma que la de Julio Anguita en su día, las fuentes consultadas por este diario explican que Griñán insistirá en ese asunto para intentar parar, lo máximo posible, las contrapartidas que pedirá Diego Valderas en las negociaciones entre ambos tras la huelga general.
