Andalucía exige estar presente en todos los gabinetes de crisis sobre Gibraltar

Susana Díaz ha pedido a Exteriores que le convoque en nombre de los 7.000 andaluces que trabajan en la colonia

Margallo, Díaz y el Peñón.
Margallo, Díaz y el Peñón.

La presidenta de la Junta de Andalucía ha acordado con el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, que se haga todo lo posible para asegurar la participación de la región en todos los foros sobre Gibraltar. Susana Díaz quiere estar presente siempre que se toquen temas que estén gestionados por la comunidad autónoma, como la pesca.

Según ha podido saber El Confidencial Autonómico, la preocupación que hay por la manera en que afectan las crisis con el Peñón a los “casi 7.000 trabajadores de la comarca del Campo de Gibraltar en la colonia” es lo que ha movido a la presidenta autonómica a exigir a Margallo que se tome en consideración a Andalucía en los foros de debate.

Aunque aseguran “respetar” las atribuciones del Estado en este asunto, desde la Junta han pedido que ante cualquier diálogo con los Ejecutivos de España, del Reino Unido y de la colonia se tengan en cuenta las competencias autonómicas: pesca, medio ambiente, educación y sanidad.

En una reunión con el responsable de Exteriores, Susana Díaz ha expresado su inquietud por la severidad de los controles de entrada y salida al territorio británico, así como “el impacto que este contencioso provoca en toda la zona”.

Ha pedido al Ministerio que se intenten “suavizar las medidas que afectan a los ciudadanos del Campo de Gibraltar”, según fuentes de la consejería de Presidencia, comandada por Manuel Jiménez Barrios.

Las colas en el Peñón, un problema

La espera para entrar a Gibraltar desde La Línea ha alcanzado en los últimos meses medias de entre dos y tres horas. Tal y como ya contó este confidencial las autoridades gibraltareñas habían denunciado que se producían “demoras de casi seis horas”.

La pasada primavera aparecieron en el lado inglés de la Verja varios carteles que alertaban a quienes transitan los accesos a Gibraltar de que aquellos que se sintieran “agraviados” por las colas podían elevar sus quejas al Ministerio de Asuntos Exteriores de España o a la Comisión Europea.

El paso fronterizo de Gibraltar soporta cada año 13 millones de visitas turísticas y el desplazamiento de 7.000 trabajadores en días laborables. Las colas se están convirtiendo “en un suplicio”, especialmente para esos empleados, que padecen los atascos en caravanas que pueden prolongarse entre dos y seis horas.

Gibraltar y el dinero de Europa

 

La crisis diplomática con Gibraltar no sólo tiene impacto a nivel de imagen: en el gabinete presidido por Susana Díaz preocupa un posible “menoscabo” de los fondos europeos para la cooperación transfronteriza.

Esas ayudas ascienden a casi 200 millones de euros que Andalucía debería ingresar entre los años 2014 y 2020. Están relacionados con los acuerdos de colaboración –desde comercio a educación– que mantiene la Junta en pos de una ‘buena vecindad’ con el norte de Marruecos.

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