Almería, en guerra contra Susana Díaz
Políticos y empresarios de la única provincia sin ningún consejero en la Junta de Andalucía boicotean la agenda de la presidenta y sus cargos
La indignación en Almería y provincia por haberse quedado sin un representante en la remodelación de la Junta llevada a cabo por Susana Díaz se ha convertido en un foco de preocupación que no se disipa. Hay preocupación por la fuerza del lobby almeriense.
Según ha podido saber El Confidencial Autonómico, se han detectado voces críticas en el PSOE almeriense, todavía ‘dolido’ por lo que consideran un agravio de la presidenta, y en círculos empresariales y agrarios.
Entre los más beligerantes ha estado el secretario general del PSOE de Almería, también diputado autonómico, José Luis Sánchez Teruel. Fuentes consultadas aseguran que estuvo a punto de dimitir para mostrar su disconformidad con la exclusión de lo que en algunos foros se denomina ‘la cuota almeriense’.
La primera visita a Almería por parte de Díaz tuvo lugar a finales de septiembre. En las diferentes comparecencias públicas que protagonizó intentó apaciguar los ánimos: aseguró estar al tanto del malestar, pero consideró que no cabría solventarlo “nombrando a un almeriense al frente de una consejería”.
Dentro del gabinete, el PSOE aporta a ocho consejeros. Ahora mismo son todos andaluces excepto Luciano Alonso (Educación) y Emilio de Llera (Justicia e Interior), ambos extremeños, que han ejercido en política desde Málaga y Sevilla respectivamente.
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No sólo hay movimientos contra la Junta en el ámbito político. Ya se han producido varios desplantes en reuniones a las que las organizaciones empresariales almerienses se han negado a asistir.
Ha sido el caso de la Cámara de Comercio de Almería –convocada sin éxito por el vicepresidente Diego Valderas a un encuentro en Sevilla– y la patronal Asempal, la Confederación Empresarial de la Provincia de Almería.
La agitación de las instituciones almerienses contra la Junta va camino de convertirse en un problema crónico, y fuentes de la provincia creen que Almería puede convertirse en protagonista de la primera crisis de Gobierno de Susana Díaz.